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domingo, 18 de diciembre de 2011
No sé que es lo que nos cambio.
Aún recuerdo esos días de resaca,en los que no hacía efecto ni un puto ibuprofeno .Todo era distinto.Aún nos queríamos,todavía estaba ilusionada.Tú no mediabas palabra,solo sabías reírte.Yo en cambio,usaba el tiempo para pensar en lo que podía ocurrir,y sin miedo,te dije;"Puede pasar de todo,¿verdad?cualquier cosa.Puedes llegar a amar tanto a una persona,que tan solo el miedo a perderla ,sea la causa de su pérdida.Puede darse el caso,de que la distancia tome el papel protagonista ,y nosotros ,comencemos a estar en un segundo plano.O,quién sabe,hasta podría ocurrir,que acabáramos en una villa perdida de Wisconsin,porque,en serio,podría llegar a pasar de todo,¿verdad?".Sabes,en ese momento,me encantó tu respuesta,esa frase que pronunciaste,y hoy me repito a mí misma;"Exacto pequeña,puede pasar de todo".Pero,realmente,lo que más recuerdo,aquello de lo que nunca podré olvidarme,de aquello que jamás podré desprenderme,es de esa sensación.Si.Esa sensación soluble de rabia,nostalgia y culpa.Y es que,de todo lo que pudo pasar,no pasó absolutamente nada.
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