Desde que era pequeña siempre fuí una niña rebelde, y cada vez que había una discusión en casa, iba a esconderme al lado de la puerta por si tenía la necesidad de irme de esa casa. Hoy he vuelto a sentir esa necesidad, como cada dia. Porque estas arta de salir a la calle con esa sonrida finjida, que te pregunten qué tal estas , respondas un bien y que no te digan que no es así, que no estás bien, que estas muerta por dentro y te estas empezando a morir por fuera.
No hay comentarios:
Publicar un comentario